Entre las características de nuestra alimentación veraniega está la de más comidas fuera de casa y en horas no habituales. Aumentan los viajes, las actividades al aire libre, así como la ingesta de dietas inadecuadas. Un día de playa, piscina o montaña implica un cambio agradable en la rutina diaria, pero que puede perjudicar nuestra boca. Si aprendemos a descubrir cómo afecta a la salud bucodental el cambio de hábitos, minimizaremos los daños.

Posibles peligros

Cuando dejamos de cepillar nuestros dientes después de cada comida, propiciamos la acumulación de placa bacteriana. Surgen caries, enfermedades de las encías y pérdida de dientes.  También utilizamos menos seda dental y enjuagues bucales.

Muchas personas en su período vacacional consumen más alcohol, café, té y tabaco. Estos productos favorecen la periodontitis, manchan el esmalte y además generan halitosis o mal aliento. El tabaco merma la oxigenación de las mucosas, lo que afecta los tejidos que bordean al diente.

El aumento en el consumo de alimentos y bebidas frías puede desencadenar en hipersensibilidad dental. El pH de algunos de estos productos es ácido, lo que desmineraliza y erosiona el tejido dentario. La exposición permanente al agua de la piscina con un pH inferior a 6 también es dañina. Puede ocasionar alteraciones en el esmalte dental

Los traumatismos dentales son un riesgo latente en vacaciones, cuando aumenta la práctica de deportes al aire libre. La pérdida, rotura o dientes flojos, pueden ser una consecuencia que obligará a ir al odontólogo con urgencia.

Recomendaciones

Algunas frutas y verduras combaten la aparición de las bacterias e ingerir mucha agua permite mantener la boca hidratada y un adecuado flujo de saliva. Es muy positivo combinar los alimentos y bebidas frías con sólidos para minimizar los daños.

No hay que suspender los tratamientos bucales o de ortodoncia durante las vacaciones. Esto ocasionará retrasos en los procesos de curación, que afectarán la salud bucodental de manera considerable.

Si pierde, se fractura o se afloja un diente, se debe acudir al odontólogo lo más pronto posible. Estas piezas dentales fuera de la boca deben reinsertarse lo más pronto posible. Si están sucios, las lavaremos en el grifo durante unos segundos sin tocar la raíz, e intentaremos colocar en su sitio mientras se llega a la consulta. Debe hacerse con rapidez para favorecer la reimplantación.

Otros cuidados

En ocasiones se tiene el mal hábito de abrir envases con los dientes o mordemos objetos duros, con el correspondiente desgaste dental. También solemos frotar con mucha fuerza y extender la vida útil del cepillo. Lo primero maltrata los dientes y lo segundo resta efectividad.

La higiene dental no debe descuidarse en ninguna época del año. Los cambios de hábitos afectan la salud bucodental de distintas maneras. Cuando eres consciente del daño que puedes ocasionar a tus dientes lograrás disminuirlo. Esmérate en mantener la rigurosidad en el cuidado de tu boca y conseguirás una mejor salud dental.

En nuestra clínica LG Dental nos preocupamos por la prevención y tratamiento de problemas en la boca de nuestros pacientes. Todo ello ofreciendo los mejores especialistas y una tecnología de última generación.